Más Tolstoi, porque nunca es tarde para aprender a montar en bicicleta

Al día siguiente me desperté tarde, como de costumbre cuando viajo. Me quedé un ratito en la cama para paladear el recuerdo de la noche anterior y, cuando el hambre venció a la pereza, me marché de nuevo a la plaza Roja. Ni qué decir tiene que las sensaciones fueron muy distintas. Primero añadí Lenin…

Rusia, la culpa fue de Tolstoi

Llevaba ya mucho tiempo queriendo volver a escribir sobre mis viajes, pero esta ciudad y vuestra pequeña escuela me tienen absorbido a la par que absorto. Y, aunque no vaya a ser en directo como en anteriores ocasiones, no quiero perder la oportunidad de recontarme y contaros cómo fueron aquellos cortos e intensos días en…